Medidas de seguridad en la sala de endoscopia en tiempos de COVID-19

Proteger a los médicos, al personal asistente y a todos los pacientes del riesgo de infección por COVID-19 es uno de nuestros objetivos principales en estos tiempos de pandemia, además de preservar el funcionamiento normal de la unidad de endoscopia manteniendo un servicio de alta calidad.

La transmisión del virus ocurre principalmente a través de gotículas y aerosoles de pacientes infectados. Las manifestaciones del COVID-19 varían de una enfermedad leve, a manifestaciones graves, pudiendo evolucionar a insuficiencia respiratoria, shock, disfunción multiorgánica y muerte.

Los síntomas clínicos más frecuentes varían desde fiebre, tos seca, dolor de garganta, fatiga, dificultad respiratoria, falta del gusto, falta del olfato, náuseas, evacuaciones diarreicas, dolor abdominal, cefalea, problemas neurológicos, cardiovasculares, etc.

También puede persistir en el tracto respiratorio a pesar de tener pruebas o resultados negativos. Es importante mencionar el alto número de pacientes asintomáticos portadores del virus actualmente, lo que hace necesario realizar pruebas y mantener las medidas de protección requeridas.

Protocolos de bioseguridad:

  • Se realiza triage al agendar la cita y 24 horas previa al estudio, de manera telefónica en pacientes ambulatorios, interrogando sobre historia de fiebre, síntomas respiratorios, tos, disnea, diarrea, dolor abdominal, pérdida del olfato, del gusto, familiares o contactos con los síntomas previos mencionados. Cualquier contacto con un caso sospechoso o confirmado de COVID-19 o viajes recientes al extranjero.
  • Espaciar al máximo los pacientes citados para estudios (mínimo 2 metros).
  • Máximo 1 acompañante y este debe esperar fuera del área de procedimientos.
  • El paciente y su acompañante deben acudir con mascarilla y realizar lavado de manos antes de entrar a la unidad de endoscopia.
  • Hoja de entrevista que incluya temperatura.
  • Las emergencias son tratadas como si fuera COVID-19 positivo.
  • Minimizar el contacto entre personal de salud.
  • En sala de endoscopia solo el personal necesario.
  • Al terminar la endoscopia, desinfectar y limpiar todas las superficies y materiales que han estado en contacto con el paciente y/o sus secreciones, tanto en la sala de procedimientos como en área de recuperación.

Dr. Bernardo González, Gastroenterólogo Centro Médico Bournigal